jueves, 23 de octubre de 2014

Moscas en la Cocina (IX) - Alvaro Ledesma

Moscas en la Cocina  (IX)
- Alvaro Ledesma -

Olvidaros de la poesía que la vida reparte a hostias.
Mudó un libro desorientado a ser casa deshabitada.

Se está mejor en la cuna.

Los unos sin los otros se vuelven ellos mismos.
Si no sangran las manos sangra el sentimiento.

Hartas de los toldos se amaron las manivelas.

No tienen sexo las luces de los coches.
Exactas las medidas fallaban los colores.

En cadena se cometen los errores.

No hagáis caso a la ansiedad cuando inclina las paredes.
Es de neuróticos atragantarse sin espinas.

Si no es real qué pinta en la cabeza.

Bolas de papel orbitan alrededor de lámparas de techo.
Satisfechos los incautos ignoran lo que llega.

De tanto querer olvidaron amarse.
Suman veinte dedos dos mitades.

Crónicas futuras no alteran el presente.
Viajar en el tiempo sin llevar nada en la mente.

No digo que no exista aquello que pensamos.
Es literatura el final de cada vida.

Se obsesionan los cuerpos por lucir esbeltos.
Presiona tener que hacer y no saber el qué.

Subir escaleras que bajan es más que un juego de niños.
Enhebradas las agujas cosen lenguas de trapo.

Le preguntaban por su nombre y respondía que le gustaba el color verde.
Muerta la memoria se libera el alma.

Se escapa el aire de los pulmones rotos.
Nada extraña a los ojos huecos.

Sueños diurnos contra pesadillas nocturnas.
Cráneos calvos con diademas espantapájaros.

Poco importan los motivos por los que ser polvo de talco.


Alvaro Ledesma (2014)